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RECUERDOS
Rocas que rompen el mar,
violentas caricias de espuma,
mirada perdida,
su llegada, su partida...,
la mano extendida la señala.
Un día claro, el sol calienta,
el verde perenne se mantiene
y viste el acantilado
a pesar de ser invierno.
Atrás dejan mis pasos el asfalto
descubro lo poco que salvaje queda,
el azul es verde, presente, eterno,
ondula sus besos en la orilla.
Imágenes en blanco y negro,
un museo, unas fotos de recuerdo,
pasado borrado en el presente.
Edificios que roban el espacio,
bulevard paseo o lo que fueres
que acompañas mis pasos,
salpicado de piezas de hace años,
queriendo ser ahora siendo antes,
esculpidos en madera, hierro, cemento o bronce.
El aire es limpio, mediodía,
oxígeno yodado mezclado con el humo
de un pitillo.
Llego a la casa
impregnada de recuerdos
y encima del fuego, justo al lado,
el tiempo golpea acelerado
las horas los minutos y segundos.
Detrás desorden intencionado
imágenes que alguna reconozco,
otras imagino.
Sentado veo pasar la tarde.
Olor a mar impregna el recinto.
Pasa la tarde cálida del domingo.
Rocas que rompen el mar,
violentas caricias de espuma,
mirada perdida,
su llegada, su partida...,
la mano extendida la señala.
Un día claro, el sol calienta,
el verde perenne se mantiene
y viste el acantilado
a pesar de ser invierno.
Atrás dejan mis pasos el asfalto
descubro lo poco que salvaje queda,
el azul es verde, presente, eterno,
ondula sus besos en la orilla.
Imágenes en blanco y negro,
un museo, unas fotos de recuerdo,
pasado borrado en el presente.
Edificios que roban el espacio,
bulevard paseo o lo que fueres
que acompañas mis pasos,
salpicado de piezas de hace años,
queriendo ser ahora siendo antes,
esculpidos en madera, hierro, cemento o bronce.
El aire es limpio, mediodía,
oxígeno yodado mezclado con el humo
de un pitillo.
Llego a la casa
impregnada de recuerdos
y encima del fuego, justo al lado,
el tiempo golpea acelerado
las horas los minutos y segundos.
Detrás desorden intencionado
imágenes que alguna reconozco,
otras imagino.
Sentado veo pasar la tarde.
Olor a mar impregna el recinto.
Pasa la tarde cálida del domingo.
Recuerdos... cuantos espacios llenan de nuestra acelerada calma... recuerdos, esos pequeños murmullos que a veces se hacen sollozos y otras suspiros... delicioso haber vivido esos recuerdos contigo, me he impregnado de todo.
ResponderEliminarUn beso
Recuerdos que se hacen presente cuando los precisas. Recuerdos que son sonrisas y alegrías también. Recuerdos que son siemrpe consuelo.
ResponderEliminarUn beso Lorea.
Salva